Con motivo de las fiestas en honor a Santo Domingo de la Calzada, la Cofradía que lleva su nombre organizó una peregrinación a la ciudad natal del santo en Logroño, La Rioja.
Lunes, 11 de mayo
El lugar de encuentro se estableció, como no podía ser de otra manera, en el Ministerio de Fomento donde, después de comer todos juntos, se inmortalizó el inicio del viaje con una fotografía a los pies de la estatua del Santo, obra del escultor Nombre Apellidos.
A continuación, se inició el viaje, que no se detendría hasta el Restaurante Las Campanas, en cuya cercana área de descanso se encuentra el Miliario, una suerte de XXX. Reiniciado el viaje, la siguiente parada, esta vez algo más larga, se produjo en el municipio de Lerma, donde se visitó su Parador de Turismo, de marcado estilo herreriano, otrora sede del Ducado de Lerma.
Después de bordear Burgos, y saludar a la reina coronada de las catedrales góticas, el autobús con sus 29 peregrinos (o 30, que no hay que olvidar al conductor), llegó a Santo Domingo de la Calzada, que bullía en fiestas. Después del acomodo de las habitaciones y una ligera cena, el grupo se dirigió a la plaza de la Catedral, como primera toma de contacto con la ciudad del Santo.
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Martes, 12 de mayo
A la mañana siguiente la primera cita obligada era a las 6 de la mañana, cuando la Cofradía ofrecía el desayuno tradicional que ofrecía Santo Domingo a los peregrinos que atendía: carnero, garbanzos y berzas. No obstante, ningún peregrino de la Cofradía se decidió a tomar tan imponente desayuno.
El siguiente acto, casi de asistencia obligatoria, fue la Solemne Misa Pontifical, presidida por el Obispo de la Diócesis de Calahorra-La Calzada, D. Juan José Omella Omella, y concelebrada por los miembros del Cabildo Catedralicio. A ella asistieron también las autoridades municipales, regionales y autonómicas, encabezadas todas ellas por Dª. Ana Pastor quien, en calidad de Ministra de Fomento, acudió para venerar al Santo Patrón del ministerio que encabeza.
Tras la Eucaristía, salió de la Catedral la cruz procesional, después la cual desfilaron los pendones de las cofradías, incluido el de ésta, el estandarte de la Cofradía local, los danzadores y finalmente el trono con la estatua de Santo Domingo, cerrando el cortejo procesional el Cabildo con hábito coral y el Sr. Obispo.
Al regresar a la catedral y entrar el trono procesional, resonaron las notas del himno del Santo que todos los asistentes cantaron a coro, mientras las andas se dirigían al centro de la girola, donde Santo Domingo esperará hasta que el próximo 12 de mayo, los calceatenses lo alcen y bailen por las calles de su ciudad.